Quirón es un cuerpo celeste que fue descubierto en 1977; despertó en seguida el interés de los astrólogos, sobre todo en los países anglosajones, por estarcolmado de significados que resultan estar en perfecta armonía con el periodo histórico, social y evolutivo en el que vivimos.
De hecho, Quirón desde el principio ha sido identificado con la figura del Maestro interior, esto es, con la imagen arquetípica del terapeuta interior capaz de conducirnos de una situación psíquica a otra, enseñándonos a aprender de nuestras experiencias, es decir, de lo que normalmente hacemos en la cotidianidad, y al mismo tiempo, aprendiendo también a considerar importantes y sagradas las intuiciones y percepciones que parecen provenir de una dimensión ajena y, sin embargo, resultan indispensables para comprender lo que estamos haciendo y, sobre todo, cuál camino hemos tomado.

Quirón es una especie de guía que nos conduce de las experiencias limitantes, a veces castrantes del karma, generalmente relacionadas con vidas anteriores o con experiencias vividas en la primera infancia, a aquellas más libres y exentas de condicionamientos, escogidas autónomamente en el momento de la encarnación actual, típicas del dharma. En suma, Quirón nos ayuda a vivir las experiencias que pueden llevarnos a cambiar nuestra perspectiva, al modificar las actitudes, condicionamientos y costumbresque nos impiden avanzar en nuestro camino de crecimiento psicológico, espiritual y transpersonal.
En todo caso, cabe recordar que, a lo largo de este proceso de crecimiento, Quirón nunca se olvida de la experiencia pasada, al contrario, trata de aprovecharla, sin dejarse aplastar por ella, y haciendo que deje de condicionarnuestras elecciones, al superar todas esas actitudes que se originan en la coacción de repetir patrones disfuncionales aprendidos en las vidas pasadas.

A nivel kármico-evolutivo, Quirón tiene un significado muy profundo en lo referente a la vida afectiva. Pues bien, nos proporciona útiles indicaciones acerca de nuestras heridas más profundas y de lo que nos causa sufrimiento en la relación con el otro: la posición de la casa en la que cae nos brinda informaciones bastante precisas acerca de nuestro imprinting afectivo y, por consiguiente, de nuestro talón de Aquiles en las relaciones interpersonales.
No es por casualidad que, al encontrarse Quirón en posicióndominante en uno de los cuatro ángulos del cielo, más precisamente, cerca del Ascendente o del Medio Cielo, podemos convertiros en curanderos, chamanes o terapeutas: ayudar a los demás termina siendo una cura para nosotros mismos, una manera de sanar nuestras heridas y de llenar el vacío emocional heredado de las vidas anteriores o causado por la carencia de afecto en la primera infancia.
Así que Quirón puede convertirse en nuestro maestro y curandero por una necesidad interior, es decir, poruna especie de llamada que proviene de los niveles más ancestrales del subconsciente, lo mismo que les ocurre a los chamanes, y que es difícil, sobre todo al principio, entender plenamente y contextualizar de manera clara.
De hecho, no es por casualidad que Quirón sea dominante en la carta natal de quienes ayudan profesionalmente a los demás, poniendo a disposición su experiencia personal de elaboración del dolor, llevada a cabo a lo largo de un proceso de formación como, por ejemplo, un análisis psicoanalítico personalu otro entrenamiento en una de las denominadas disciplinas alternativas.

Sin embargo, la enseñanza más auténtica de Quirón se refiere al mundo de las emociones, y consiste en la capacidad de encontrar el correcto equilibrio entre ternura y determinación, entre romanticismo y concreción, entre sueño y realidad. Dicho de otra forma, Quirón puede enseñarnos a vivir nuestras emociones de forma más consciente y serena, al superar los condicionamientos que nos impiden desarrollar nuestro potencial y ser protagonistas de nuestra vida afectiva, debido a la tendencia a repetir patrones relacionales heredados de existencias anteriores.